24 de diciembre de 2011

noche de paz?

estoy sola, una noche en la que creas o no, te guste o no, se junta todo el mundo y jugamos a ser felices, casi siempre sin ganas ,y nos mordemos los labios cada vez que oyes una sarta de estupideces de quien tienes enfrente....por elección,porque tengo un día perro,como casi este año entero ,y a ver si se acaba de una vez y  me creo eso de que año nuevo vida nueva...he escrito poco porque paso de contar penas,que como a la mayoría nos atenazan la garganta ultimamente.En un día como hoy, echo de menos a los que no están ,no porque no han venido,a los que se fueron sin pedir permiso...recuerdo a base de programas rancios,aquellos días en los que eramos una tropa en casa de ama y olía a langostinos desde el portal y, al llegar, la humareda te avisaba de que mi padre estaba jugando a cocinillas...me encantaba verle enredando en la cocina mientras revoloteábamos alrededor... a ver quien era el valiente que cogía uno sin que se diera cuenta...luego preparaba bandejas con mazapán y polvorones y esas almendras blancas y piñones...ponía el numero del año nuevo con turrón blando y colocaba con orden meticuloso el resto que hasta daba pena deshacerlo.Y de madrugada,cuando se acababa la fiesta,cansados de ver a los artistas de moda y el humor zafio de siempre,nos llevábamos a la cama lo que quedaba para completar el empacho y tirarnos los papeles de plata, hechos pelotitas,de una litera a otra a modo de batalla.Como me cuesta entender tanta ausencia,entender que debería ser una noche como otra cualquiera,pero si pienso en lo vacíos que llevo los bolsillos estos días,no puedo evitar recordar, añorar la carrera a las 12 donde no había cenicientas, sino las prisas por no llegar tarde que llevábamos meses ensayando en el coro del colegio...aquella era otra navidad...

1 de diciembre de 2011

Ay Aquilino¡¡¡, ke no,ke no...

ya decía yo que no me encontraba bien ultimamente. Extraños síntomas  me hacían pensar  que algo se estaba gestando por aquí dentro y no se parecía a una gripe ni a otra patología conocida .He necesitado que vengas tú a decirme, Aquilino Polaino, lo que me pasa.Estoy enferma y sabes qué?, que si tu diagnóstico es ese, estoy además terminal, y ni voy a buscar remedio alguno e incluso voy a seguir relacionándome con enfermas como yo porque no entiendo otra mejor manera de vivir mi vida que enfermando continuamente. No pienso tomarme las pastillas que individuos como tú recetáis para ,con leyes absurdas, construir más diferencias y espero que mi falta de método haga que mis hij@s sean cada vez más libres para elegir,incluso si quisieran enfermar también.A ver como compaginais tanta lista de espera con ese copago que lleváis debajo de la manga. Se os van a llenar las estadísticas ,que no los hospitales ,que la única terapia que necesitamos es la visibilidad suficiente para que se os atragante la comida, cada vez que nos damos un beso de lengua , delante de vuestra intolerancia.No necesito que me deis la baja, no me he sentido mejor en toda mi vida...bon appétit¡¡¡¡