ahí vamos...

...estoy escuchando una canción,de esas que repetías una y otra vez,cuando creías que nunca más ibas a volver a sentir,cuando habías perdido la esperanza...a través de la música,intento poner en orden tu desorden y quizá,si la escucho tantas veces,consiga poner sonido a tus silencios...en aquellos momentos, cuando prometiste que nunca más,que no te volvería a pasar,que nadie jamás iba a volver a entrar,y menos sin permiso,cuando descubriste la manera de protegerte y aprendiste a edificar,a toda velocidad,cuando acechaba el peligro...intento comprender, eso es todo...he llegado a percibir hasta el dolor,letra a letra,y he sentido tu pena con tanta intensidad,que me ha conmovido...ese camino,que hemos recorrido la mayoría,intransferible,nos hace o más fuertes o más inaccesibles,por eso había pensado compartir viaje contigo,de ahora en adelante,porque quizá,entre las dos,seamos capaces de apartar las piedras antes de tropezar,o como dice la canción,envenenarnos o no beber...en cualquier caso, el vaso estaría en tu mano o en la mía pero cada una tiene que decidir qué hacer.

No estaría mal dejar de interpretar por una vez y vivir,salir a escena,pase lo que pase,y dejar de protegerse porque es así como no te pierdes nada.Puede llegar de frente o no llegar nunca,pero estarías siempre viva,emoción y sensaciones atropelladas,ya tendrás tiempo de organizar los cajones otro día.Poner nombre o mencionar sin acierto es lo menos importante.Saber quien eres,saber quien soy,mundos paralelos que convergen de repente,y que se explican uno a otro y a nadie más.
Te cedo el tiempo que me sobra para que puedas reconocerte en mis errores y aciertes la próxima vez.Te presto mi lokura para que seas cuerda y mis ganas para que retocen con tu pereza, pero no dejes de salir cada día a estrenar esta vida nueva,indescriptible...