...laa,lalalaa,lalala

...hay canciones que tienen dueña,pase lo que pase, y una de dos ,o lo aceptas o mejor que no vuelvas a escucharlas.Yo ,como quiero que cada una tenga lo que es suyo y no podría compartirlas otra vez,he hecho una limpieza a conciencia en mi ipod y he decidido escuchar las que no tienen nombre y las que voy conociendo ahora.Dejo en la memoria, una lista de irreproducibles o de no aptas para ciertas ocasiones y me evito interferencias nocivas e innecesarias.Que decido recordarte,pues me enchufo una,que quiero saber como me siento al escucharla,pues a por ella y así ,a través de la música detecto mi grado de curación de cada historia.
He descubierto algunas ultimamente, que quiero bautizar ,pero no sé qué nombre ponerles.No tengo con quien compartirlas,pero sé que me las voy a aprender y cuando te vea llegar sabré que tengo que empezar a cantar...sabré que querrás bailarlas conmigo y que gesticularemos, a la vez, los trozos que nos emocionan ,porque compartimos ese pensamiento,esa frase tan manida pero que nos parece lo mejor que se puede decir en ese momento.Y desde "no puedo vivir sin ti", hasta "te quiero y no hago otra cosa que pensar en ti.",..iremos recitando la cantidad de cursilerías que se dicen a diario en las baladas y mirándonos a los ojos, sentiremos que lo que nos pasa es único y que nadie nos comprende ,y pensaremos que no saben lo que se pierden...y una sonrisa espectacular nos cruzará la cara a las dos y no veremos el momento de seguir cantando...
Y cuando no estemos juntas ,esas canciones que nos hacen sonreír,nos parecerán un auténtico drama porque sólo la proximidad nos hará sentirnos seguras y a salvo.
Quiero cantar para ti,no sé a que estás esperando para venir...